El camión fue encontrado en una zona de poco tránsito, cerca de una vía de tren en el suroeste de San Antonio, que queda a unos 250 km de la frontera entre EE.UU. y México.
Un total de 46 migrantes fueron hallados muertos el lunes, la mayoría de ellos ubicados dentro de un camión al lado de una carretera en Texas, informaron las autoridades.
Además, informaron que otras 16 personas fueron rescatadas con vida, en distintas condiciones, y llevadas a hospitales de la ciudad. 12 de ellas son adultos y los otros cuatro niños.
"Los pacientes que vimos estaban calientes al tacto, sufrían de insolación, agotamiento por el calor, y sin señales de agua en el vehículo. Era un camión refrigerado, pero no había evidencias de que hubiese una unidad de aire acondicionado funcionando".
Por su parte, el gobernador de Texas, Greg Abbott, republicano que defiende una línea dura sobre la migración, lanzó un duro ataque al presidente Joe Biden y culpó a sus "mortíferas políticas de frontera abierta".
"Estas muertes pesan sobre Biden", escribió Abbott en Twitter. "Muestran las consecuencias mortales de su negativa a endurecer la ley", agregó.
El ministro de Exteriores de México, Marcelo Ebrard, calificó el incidente de "tragedia" y dijo que el cónsul mexicano iba en camino al lugar.
Ebrard informó que las nacionalidades de las víctimas aún eran desconocidas, pero que entre los sobrevivientes había dos guatemaltecos.