
Molinos Agro y la empresa francesa Louis Dreyfus Company (LDC) presentaron una propuesta conjunta para adquirir Vicentin y así avanzar en el proceso de reestructuración de la empresa agroexportadora, a cinco años del comienzo de su concurso preventivo.
Ambas compañías destacaron el alcance de la iniciativa al afirmar: “Nuestra propuesta refleja el compromiso de ambos grupos con la estabilidad del sistema agroexportador y con la búsqueda de una solución definitiva para Vicentin, que sea justa para los acreedores y sostenible en el tiempo”, según el comunicado conjunto.
El plan contempla un pago inmediato del 80% de la deuda verificada en dólares a los 30 días de la homologación judicial, junto con la posibilidad de que los acreedores alcancen una recuperación total de hasta el 90% en tres años, aplicando una tasa de interés anual del 4%. Esta estructura no exige a los productores la entrega de mercadería ni la provisión de financiamiento, lo que introduce flexibilidad en el proceso.
La propuesta detalla alternativas de pago diferenciadas según el monto de la deuda. Para obligaciones de hasta USD 130.000, se ofrece el 80% a los 30 días o el 90% en tres años, con el interés mencionado. En el caso de deudas entre USD 130.000 y USD 400.000, los acreedores pueden optar por el 50% a los 30 días, el 55% en tres años o el 70% en 10 años, siempre con un 4% de interés anual. Para montos superiores a USD 400.000, la opción principal es el 40% en 10 años, con alternativas adicionales a elección de los acreedores.
El esquema incorpora la posibilidad de capitalizar créditos en acciones preferidas rescatables, permitiendo a los acreedores convertirse en accionistas con derecho a un dividendo preferido anual y un valor de rescate a su elección.
Desde la perspectiva de Molinos Agro y LDC, la fortaleza de la propuesta radica en la combinación de solidez financiera, experiencia operativa y una visión de largo plazo, orientada a preservar la capacidad productiva, el empleo y la relación con los productores. Ambas empresas subrayaron: “Creemos que esta alternativa representa una oportunidad real para recuperar la confianza, proteger el empleo y asegurar el futuro de una de las compañías más importantes del sector”, según el comunicado conjunto.
La iniciativa será evaluada por las autoridades judiciales y los acreedores en el marco del proceso de salvataje.
Otra propuesta
El plan de Molinos Agro y LDC se conoce como alternativa a otra propuesta en el escenario tendiente a evitar la quiebra de Vicentin. A cinco años del inicio del concurso preventivo, la empresa atraviesa la apertura del proceso de cramdown, el mecanismo que permite a un tercero presentar una propuesta de pago para no quebrar.
Hasta ahora, la única oferta conocida era la de Grassi SA, que busca quedarse con el control de la agroexportadora mediante un esquema de compensaciones destinado a convencer a los 1.600 acreedores que tiene la compañía.
La propuesta, presentada formalmente ante el juzgado y difundida en la web cramdownvicentin.com, contempla una amplia variedad de opciones según el tipo y tamaño del acreedor, con la particularidad de que todos los créditos serán convertidos a dólares a una tasa de $60,78 por unidad, valor correspondiente al 10 de febrero de 2020, fecha en que se verificaron las deudas.Según explicaron desde la firma, el objetivo es evitar la liquidación de activos y reactivar la operatoria de Vicentin a partir de la originación de soja.
“Vimos hace cinco años que era fundamental mantener, sin desguazar. Lo que necesitamos es poder competir con estos monstruos y para eso necesitamos originación de soja”, señaló Mariano Grassi, presidente de la compañía, en diálogo con Infobae.
