Solá posterga cumbre en Brasil y rechazará la baja del arancel


La cumbre diplomática bilateral con Brasil se demorará unas semanas, pero el planteo argentino está definido. Como el canciller Felipe Solá acompañará al presidente Alberto Fernández al Vaticano, la reunión programada para el 31 de enero se postergó, aunque la postura nacional es el rechazo a la baja del arancel externo común del Mercosur.

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Fuentes oficiales señalaron a BAE Negocios que el canciller Solá decidió viajar a Europa y por ello, la cita con su par de Brasil, Ernesto Araújo, se postergó para febrero. "Lo decidiremos en el año con los empresarios. Y queremos una (reunión) conjunta con empresarios brasileños", apuntaron en el Gobierno, en relación con la negativa a la baja del arancel externo.

A fines de diciembre, Solá mantuvo una extensa conversación -vía teleconferencia- con su par brasileño, Ernesto Araújo, y aceptó la invitación para visitar Brasil el próximo 31 de enero, donde se iba a abordar la problemática del arancel externo común del Mercosur. Los cancilleres decidieron discutir las rebajas al arancel externo, sector por sector, en consulta con los posibles afectados, sostuvo un comunicado de la Cancillería.

Ambos ministros decidieron mantener un canal de diálogo permanente ya que por ejemplo, la Argentina es el único de los cuatro países del Mercosur que está en contra de una baja de los aranceles, en el actual contexto económico mundial. De la conversación también participaron el secretario de Política Exterior, Pablo Tettamanti; el jefe de Gabinete de la Cancillería, Guillermo Chaves y el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli.

En esta línea, el canciller brasileño dijo que su país estaba dispuesto a aprobar el acuerdo con la Unión Europea. Por su parte, Solá "ató" este punto al impacto sobre la industria argentina y la opinión de los empresarios y trabajadores.

Brasil quiere reducir el arancel del 35% a 20% en autos; y de 14% a 7% en bienes de capital, por citar dos de los ejemplos. De acuerdo con las consultas formuladas el mes pasado por este medio a fuentes diplomáticas brasileñas, la intención de Brasil es avanzar en una primera etapa en la baja del arancel "en bienes de capital"; y en el recorte para "informática, telecomunicaciones y autos".