Luego de que el gobierno de Axel Kicillof anunciara la posibilidad de construir un acueducto para llevar agua potable a Bahía Blanca desde el río Negro, desde la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas aseguran que no se oficializó ningún acuerdo con el Gobierno bonaerense para llevar adelante la obra.
En el gobierno de Axel Kicillof estudian la posibilidad de un acueducto hacia el río Negro para poner fin a los históricos problemas de agua potable de Bahía Blanca. Desde La Plata explican que es una posibilidad que está en estudio y la consideran como una alternativa superadora el viejo proyecto del caño al río Colorado.
El subsecretario de Recursos Hídricos, Guillermo Jelinski, dejó abierta la posibilidad de crear un acueducto hacia el río Negro para traer agua a la ciudad y las localidades de la región. Según informó al diario bahiense LaPolíticaOnLine. «Todo está en análisis» y argumentó que es una mejor opción que el río Colorado por la «calidad y la cantidad» de agua que puede ofrecer ese caudal.
Jelinski explicó que la Provincia espera informes de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) que tiene control sobre los ríos Neuquén, Limay y Negro y que regula el caudal de esos afluentes. Sin embargo, desde la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas aseguran que no se oficializó ningún cuerdo con el Gobierno bonaerense para llevar adelante la obra.
“No tenemos desde la Autoridad de Cuencas ningún pedido oficial de hacer un acueducto desde el río Negro hasta Bahía Blanca. Si está gestionado desde el gobierno anterior de María Eugenia Vidal una necesidad de afluencia de agua para llegar a través del río Colorado a distintos lugares de la Provincia, pero eso es muy diferente que abastecer con el río Negro a una ciudad tan importante como Bahía Blanca”, aseguró a Medios del Aire el Ing. Fernando Curetti, representante de Río Negro en la AIC y titular del Departamento Provincial de Aguas.
Durante la gestión de María Eugenia Vidal, se anunció en reiteradas oportunidades el proyecto de acueducto al río Colorado. Incluso contaba con financiamiento del Banco de Desarrollo de América Latina. Sin embargo, en el último tramo de su gobierno, la ex gobernadora tomó la decisión de dar de baja la obra en marzo del año pasado.