Con apoyo de libertarios y bloques dialoguistas, el Congreso aprobó la Ley Bases y restituyó Ganancias, marcando un hito en la administración de Milei. Peronistas e izquierda se opusieron mientras se definió también el aumento en Bienes Personales.
Después de más de doce horas de deliberación, la Cámara de Diputados finalizó el arduo proceso legislativo en torno a la Ley Bases y el paquete de reformas fiscales propuesto por el presidente Javier Milei.
Con un respaldo mayoritario de los bloques dialoguistas de la oposición, la Ley Bases fue aprobada con 147 votos a favor, mientras que el paquete fiscal, que incluye la restauración del impuesto a las Ganancias, recibió 136 votos positivos. El Gobierno, con figuras clave como Guillermo Francos y Karina Milei, vigiló de cerca el desarrollo del debate en la Cámara baja.
Tras intensas negociaciones, el oficialismo aseguró un apoyo mayoritario inesperado en la Cámara de Diputados para la aprobación de la Ley Bases y el paquete de reformas fiscales. Destacan cambios significativos en las posiciones de algunos legisladores clave, como los votos a favor de Fernanda Ávila, Dante López Rodríguez y Sebastián Nóblega de Unión por la Patria, quienes previamente se habían abstenido.
La sesión, que inició al mediodía y se extendió hasta pasada la medianoche, reflejó un complejo panorama político y económico en torno al impacto del impuesto a las Ganancias y otras medidas incluidas en las reformas.
Esta iniciativa legislativa incluye varios puntos clave, como la delegación de facultades al Poder Ejecutivo para reestructurar organismos estatales, la creación del Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), un conjunto de reformas laborales y la autorización para privatizar ocho empresas públicas. Hubo un acuerdo entre el Gobierno y Pro para excluir de la lista de privatizaciones a Aerolíneas Argentinas, Correo Argentino y Radio y Televisión Argentina (RTA), tras una insistencia liderada por Miguel Pichetto y su bloque, quien criticó la decisión del oficialismo en el Senado de modificar la propuesta original antes de su aprobación.
El bloque de Unión por la Patria se opuso firmemente a la Ley Bases, cuestionando especialmente el RIGI, un régimen que busca atraer inversiones significativas con beneficios fiscales, aduaneros y cambiarios. Máximo Kirchner criticó el RIGI por sus posibles impactos negativos en las comunidades, mientras que Cristian Ritondo defendió el régimen comparándolo con acuerdos anteriores, como el firmado con Chevron en 2013 para la explotación de Vaca Muerta, señalando preocupaciones sobre transparencia y condiciones favorables para las empresas.