LA POBREZA SUBIÓ AL 52,9% EN EL PRIMER SEMESTRE DEL AÑO Y AFECTA A 24,9 MILLONES DE PERSONAS

El Indec informó un aumento de 11,2 puntos porcentuales respecto a fines del año pasado. La indigencia también mostró un alza, alcanzando al 18,1% de la población, lo que equivale a 8,5 millones de personas.
 

La pobreza en Argentina se disparó al 52,9% en el primer semestre del 2024, afectando a casi 25 millones de personas. Este incremento de 11,2 puntos porcentuales respecto al final de 2023 es el dato más alto desde 2003. La indigencia, por su parte, alcanzó al 18,1% de la población, lo que implica que 8,5 millones de personas no pueden cubrir sus necesidades alimentarias básicas.
 
El primer semestre del año estuvo marcado por una escalada en la inflación y la pérdida del poder adquisitivo de los salarios, que, aunque recuperaron algo de terreno, no compensaron las pérdidas acumuladas en el último año. Esta situación, sumada a un aumento en el desempleo, afectó directamente los niveles de pobreza e indigencia.
 
La "brecha" de pobreza e indigencia también refleja la gravedad de la situación: los hogares pobres tienen ingresos 42,6% por debajo de lo necesario para cubrir la canasta básica, mientras que los indigentes necesitan un 33,4% más para alcanzar lo mínimo alimentario.
 
El mercado laboral tampoco mostró mejoras: el desempleo aumentó al 7,6%, lo que equivale a más de 1,6 millones de personas sin trabajo. Además, el empleo en negro creció considerablemente, lo que refleja un deterioro en la calidad de los puestos de trabajo.
 
El gobierno ha anunciado un refuerzo de las políticas de asistencia social, como la ampliación de la Tarjeta Alimentar, en un intento de paliar la creciente crisis social. Sin embargo, los indicadores reflejan que las medidas actuales no han sido suficientes para revertir la tendencia.