
En el décimo aniversario de la muerte de Alberto Nisman, Cristina Kirchner insistió con la versión de que el fiscal se suicidó y coincidió en que la hipótesis del homicidio en las torres de Le Parc de Puerto Madero es una “insostenible mentira”.
La postura de la exmandataria fue manifestada a través de sus redes sociales, donde compartió un extenso mensaje del senador Oscar Parrilli en el que apuntó contra la Justicia por avalar la versión del crimen y también contra los medios de comunicación por seguir hablando de “su asesinato inventado”, según definió.
El texto del legislador, avalado por la presidenta del PJ Nacional, cuestionó al juez Ercolini y al fiscal Eduardo Taiano, quien días atrás ratificó que Nisman había sido asesinado debido a su trabajo en la Unidad Fiscal de Investigación del Atentado a la AMIA (UFI-AMIA).
“Alguien dijo que se vuelve de cualquier lugar menos del ridículo. El aforismo parece hecho a medida para el juez Ercolini y el fiscal Taiano”, dijo Parrilli en su tuit.
Y preguntó: “¿Resulta que a Diego Lagomarsino, dueño y entregador del arma que provocó la muerte del fiscal – cuestión sobre la que no hay controversia porque está absolutamente probado – lo imputan como partícipe necesario del homicidio del fiscal Nisman? ¿Y no estuvo un solo día preso por semejante delito? Y ojo que no estoy pidiendo que lo metan preso, solo estoy señalando lo insostenible de la mentira”.
Hoy la Justicia afirma que fue un asesinato, pero no ha identificado a los responsables.
Horas antes, el legislador de Unión Por La Patria había señalado:“Acá lo que estamos viendo es que fue un suicidio, que se mató y están inventando un supuesto homicidio”.
El 18 de enero de 2015, el cuerpo del fiscal fue hallado en el baño de su departamento en la Torre Le Parc. Presentaba un disparo en la cabeza y, junto a él, se encontraba un arma que había sido entregada horas antes por el técnico informático Diego Lagomarsino.
Todo sucedió horas previas a su presentación en el Congreso para exponer las pruebas con las que acusaba a la entonces presidenta Cristina Kirchner de encubrir a los iraníes sospechados de planear el atentado a la AMIA. Para la Justicia se trató de un asesinato, pero aún no se identificaron a los responsables.
En diálogo con la radio AM 750, Parrilli fue contundente: “Todos los años aparecen sectores del macrismo, Patricia Bullrich, y del Poder Judicial, (Julián) Ercolini y (Eduardo) Taiano, instalando en la prensa que el fiscal fue asesinado, sin presentar ninguna prueba, indicio o elemento que les dé algo de verosimilitud”.
El 14 de enero de 2015, Nisman había presentado en el juzgado de Ariel Lijo la denuncia contra CFK y el canciller Héctor Timerman (EFE)
El senador aseguró que se busca “generar una situación ante la opinión pública” para “desprestigiar a Cristina Kirchner” y a quienes fueron parte de su gobierno. “No hay ninguna intención de investigar ni de probar nada. Hace 10 años y no hay ninguna prueba. No tienen ninguna prueba”, sostuvo.
Además, advirtió que la Justicia está “escondiendo” algo porque Lagomarsino, quien fue señalado como partícipe necesario del asesinato, se encuentra libre: “Yo no quiero que lo metan preso, pero evidentemente este juez y estos fiscales están escondiendo algo”.
En esa línea, opinó que la Justicia tiene miedo de que “si lo meten preso a Lagomarsino, que hable y cuente algo más de lo que ha dicho mediáticamente”.
El 14 de enero de 2015, Nisman había presentado en el juzgado de Ariel Lijo la denuncia contra CFK y el canciller Héctor Timerman por encubrir a los iraníes prófugos del atentado a la AMIA y pedía su indagatoria. En la denuncia también se acusó al piquetero Luis D’Elía, el lobbista iraní Jorge “Yussuf” Khalil, el ex líder de Quebracho Fernando Esteche, el entonces diputado camporista Andrés “Cuervo” Larroque y el ex fiscal y ex juez Héctor Luis Yrimia. La denuncia incluía a un hombre identificado como un agente de inteligencia ligado a La Cámpora: en ese momento solo sabía que se llamaba “Alian”; era Ramón Allan Bogado.
Luego se presentaría en el set de “A dos voces” en TN para brindar detalles de su denuncia: sostuvo que “hubo una alianza” del Gobierno de Cristina Kirchner “con los terroristas” y tenía las pruebas que lo demostraban. Advirtió que estaba preparando una nueva estrategia para forzar la captura de los iraníes a través de un organismo internacional, pero no quiso adelantar la jugada. También reveló que en diciembre la entonces procuradora Alejandra Gils Carbó le había ofrecido reforzar su custodia porque la iba a necesitar, pero él rechazó la oferta, aunque ahora lo iba a reconsiderar. “Esté Nisman o no esté Nisman, las pruebas están”, agregó.
