MÁS EMPLEADOS FEDERALES ACUDEN A LA ASISTENCIA ALIMENTARIA EN ESTADOS UNIDOS

Empleados federales de los Estados Unidos formaron filas para recibir almuerzos gratuitos en un centro de ayuda en el centro de Washington, D.C.

Empleados federales de los Estados Unidos formaron filas para recibir almuerzos gratuitos en un centro de ayuda en el centro de Washington, D.C., con una afluencia notablemente mayor que en días anteriores. Esto ocurre ante el cierre del gobirerno federal de los Estados Unidos más largo de la historia.

Una empleada de los Institutos Nacionales de Salud (NIH), quien prefirió no revelar su nombre, comentó a la agencia de noticias Xinhua que se había enterado del centro de ayuda por su hermana y que era la primera vez que lo visitaba.

Como vive lejos de la zona, tomó el metro para llegar; debido al cierre del Gobierno, no recibió su salario dos veces en octubre y podría no recibirlo nuevamente este viernes. “El alquiler y las facturas siguen llegando, y la presión aumenta”, se lamentó.Apryl, quien trabaja en el Servicio de Impuestos Internos (IRS), también estaba recibiendo un almuerzo gratuito por primera vez.

Apryl declaró a Xinhua que el aumento de precios provocó que las comidas diarias sean cada vez más inasequibles, con un costo de entre 15 y 30 dólares estadounidenses por almuerzo, por lo que poder obtener comida gratis “significa muchísimo” para ella. Como madre soltera con una hija de 13 años, Apryl afirmó que la pérdida de sus ingresos ha sido devastadora.
“Intentar mantenerte a ti misma y a tu hija es casi imposible”, expresó.

Añadió que incluso su hija está experimentando estrés psicológico debido a la situación. El evento fue organizado por World Central Kitchen, que instaló varios puntos de distribución en el centro de Washington a partir del 27 de octubre.

Para la mañana del 5 de noviembre, la organización había distribuido más de 36.000 comidas, con un promedio de aproximadamente 4.000 comidas diarias.Además de los puntos en el centro, se establecieron puntos de distribución en aeropuertos y bases de la Fuerza Aérea. El personal indicó que el número de personas que buscaban almuerzos gratuitos el miércoles había aumentado notablemente, y que los suministros de alimentos se consumían mucho más rápido que antes.

El personal también reveló que los organizadores están colaborando con restaurantes locales del centro de Washington, comprándoles almuerzos para distribuirlos entre los empleados federales, una iniciativa que también ayuda a apoyar a estos negocios en dificultades. Debido a los despidos y al cierre prolongado, los restaurantes locales reportaron una disminución significativa en sus ventas. 

Aksana Tran, propietaria de una cafetería en la Avenida Massachusetts NE, declaró a los medios locales que las ventas han caído entre un 15 y un 20 % durante el cierre. Los empleados federales y los negocios locales no son los únicos afectados por el cierre en curso. 

Su impacto se está intensificando en diversos servicios públicos, incluidos los programas de asistencia alimentaria y la seguridad aérea. Debido al agotamiento de los fondos, el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP, por sus siglas en inglés) suspendió los pagos de beneficios a partir del 1 de noviembre.

Tras la intervención de dos jueces federales, el gobierno de Trump anunció el lunes que utilizaría fondos de emergencia para mantener la mitad de los beneficios durante noviembre. Sin embargo, algunos estados podrían tardar semanas o incluso meses en reanudar la distribución completa.