Un ataque ruso con misiles hipersónicos impactó este jueves en Kiev, la capital de Ucrania, causando la muerte de una persona y dejando tres heridos. Los proyectiles Kinzhal e Iskander, supuestamente suministrados por Corea del Norte, provocaron incendios en vehículos y edificios en cuatro zonas de la ciudad.
El jefe de la administración militar de Kiev, Sergiy Popko, confirmó el fallecimiento y señaló que los equipos de emergencia trabajan intensamente en las áreas afectadas. El alcalde Vitali Klitschko informó que dos personas fueron hospitalizadas y destacó los daños en varias infraestructuras.
Simultáneamente, Ucrania enfrentó un ciberataque masivo que afectó registros estatales. Según la viceprimera ministra Olha Stefanishyna, el ataque interrumpió temporalmente sistemas críticos administrados por el Ministerio de Justicia, en un intento de Rusia por desestabilizar la infraestructura del país.
Mientras las autoridades continúan evaluando el alcance de los daños, Ucrania redobla esfuerzos para mitigar las consecuencias de la ofensiva y mantener operativa su infraestructura estratégica en medio del conflicto.